Comenzar una carrera, siempre es momento emocionante, pensar en conocer gente nueva, mas personas, mas amigos, mas gente indeseable...
Mi primera impresión del Tecnológico, fue de asombro, son varios muebles de concreto adornados con granito molido, distribuidos en un terreno bastante accidentado, con una vista al monte que resulta embriagante, pero con unos jardines un poco maltrechos y llenos de bichos, y una palapa al centro que es el área común de la estudiantada.
Estar entre chavitos, reaviva mi viejo cansado espíritu, son un singular grupo de monitos, bastante educados, así como monitas sumamente lindas, todos y cada uno con sus cualidades y virtudes, hacen que me robe un poco de su jovialidad y deje la chingada amargura en mi maletín de vendedor de biblias.
Cada día es cada vez mas grato, sobre todo en compañía de la señorita de al lado, es una chikilla divina, con una sonrisa que trastorna, y unos ojos que emanan ingenuidad y a la vez misticismo.
no se me antoja poner rola hoy...
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